Gustavo Petro calificó de «semiesclavitud» la situación actual del país, con horarios laborales de 48 horas semanales.

El presidente colombiano, Gustavo Petro, propuso al Congreso aprobar la reducción de la jornada laboral a 40 horas a la semana para aumentar los niveles de productividad en el país.

El mandatario calificó de «semiesclavitud» la situación actual del país, con horarios laborales de 48 horas semanales, y señaló que es «una enorme equivocación» pensar que «entre más se explote a los trabajadores con altas jornadas laborales, inestabilidad y bajos salarios, se hacen más ganancias empresariales».

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Evocando al filósofo Karl Marx, Petro escribió que «salarios y ganancias pueden ascender», mientras que la inversión en la educación repercute positivamente en la producción.

Petro sostuvo que “los salarios reales y las ganancias empresariales se pueden mover en la misma dirección” y añadió que el crecimiento de la productividad también está relacionado al aumento de la competencia y la destrucción de los monopolios.

El mandatario colombiano consideró fundamental que se pueda alcanzar un pacto obrero/patronal que permita elevar salarios reales y reducir la jornada laboral.

Gustavo Petro no precisó si la propuesta de reducir la jornada laboral se va a ver traducida en un nuevo proyecto de ley o si, por el contrario, se vaya a añadir a la reforma laboral que se viene tramitando en el Congreso, y que está a tres debates de poderse materializar.

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